Historia de vida

Doble nacimiento

Es tarde soleada en la aldea de Kodmapara, Bangladesh, las gentes va y viene.

Después de visitar una escuela de la Caritas católica donde un grupo de jóvenes (12 chicos y 14 chicas) en un curso técnico de seis meses para emplearlos en fábricas. 

La parroquia junto con los encargados del proyecto hicimos la entrega de notas mitad de curso a 25 estudiantes.

Después del acto me llegó esta noticia del
catequista de nuestra misión Moisés Tigga me dice que hay un anciana enferma, así que me despido y entró en la casa para ver a la enferma, pero solamente veo un señor que prepara sus cañas para pescar en la noche, le pregunto dónde está la anciana y él me responde que ya vienen para llevarme a su casa.

Mientras tanto llamo al catequista de la aldea y pregunto qué debo hacer, me dice que esperé.

Al momento llegan el catequista de la aldea, entramos en la casa del anciana y saludo, inmediatamente la nuera me manifiesta que su suegra quiere recibir el bautismo para hacerse cristiana católica.

Ya en presencia de sus hijos le pregunto a ella y a la familia reunida sobre el deseo de recibir el santo bautismo, a lo que responden que si, incluida la anciana.

Acto seguido me prepararo con la estola, el ritual, los oleos y pasamos a celebrar el bautismo, y después de la celebración nos hicimos una hermosa foto con la esperanza de poder volverla a visitar al día siguiente. Regreso a casa conmovido, descanso y el día viene e inicio mi oración cotidiana, la Santa Misa, el desayuno y una buena lectura, todavía es de mañana y recibo una llamada donde me informan de la muerte de la anciana que había bautizado.

Doy gracias a Dios y medito los versículos de San Pablo en el capítulo 6 de la carta a los Romanos: que se refiere al bautismo como participación en la Pascua de Cristo. Mi acuerdo que durante la celebración del bautismo leí el dialogo de Jesús con Nicodemo del capítulo 3 de San Juan: nacer del agua y del Espíritu, nacer de lo Alto.

Para nuestra querida anciana fueron dos nacimientos: el sacramental a través del Sacramento del bautismo puerta de entrada a gozar de todas las bendiciones y gracias salvíficas que el Señor nos ha dejado en su Santa Iglesia Católica. El segundo nacimiento más especial aún el Señor la llamó a participar de su Pascua eterna en el cielo.


Ella ya goza de la visión de Dios, de la comunión de los santos, ella ya se fue para el cielo, para la vida eterna. Ella interceda por nosotros peregrinos hacia la patria celestial. 





Posdata: La misión es nacer del agua y del Espíritu para recibir la salvación y así entrar en el Reino de Dios.




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